¿Enfermedad laboral o común?

La Superintendencia de Seguridad Social ha emitido una resolución en la que acoge el reclamo de una trabajadora contra su Isapre, la cual rechazó de manera sistemática sus licencias médicas atribuyendo su dolencia a un origen profesional, lo que no ha sido acreditado. La afectada había presentado licencias médicas por un diagnóstico de trastorno de ansiedad generalizada, exacerbado por conflictos familiares y el cáncer de mamas que padece.

La resolución indica que, aunque la Isapre argumentó que la condición tenía un origen laboral, no presentó informes médicos fundados que justificaran esta afirmación, incumpliendo los requisitos establecidos en el artículo 77 bis de la Ley N° 16.744. Según la normativa, cualquier rechazo de licencias médicas debe estar sustentado en antecedentes médicos específicos y no en suposiciones abstractas.

La Superintendencia instruyó que la trabajadora debe ser tratada bajo su sistema de salud común, y que el Organismo Administrador de la Ley N° 16.744 cubra los subsidios por incapacidad laboral. La Isapre, por su parte, podría enfrentar sanciones por el rechazo injustificado de las licencias, ya que el dictamen ha sido remitido a la Superintendencia de Salud para su consideración y eventual fiscalización.

Finalmente, se concede a la trabajadora un plazo de cinco días hábiles para presentar nuevos antecedentes si desea recurrir la resolución.

Descarga el Dictamen 146376-2024 de la SUSESO

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